miércoles, 14 de septiembre de 2011

El séptimo arte

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No tengo ni idea cuales habrán sido las seis anteriores. Están la pintura y la escultura, quizás las artes más antiguas (el de las pinturas rupestres y la talla de piedras). La música y el canto también debieron ser muy antiguas, quizás incluso más que las anteriores. A ver... me faltan tres. Están... la literatura, me faltan dos... Digamos que son... la arquitectura y el teatro. Aunque también podrían ser la fotografía, la joyería, el textil, el diseño, la danza... En definitiva, hay muchas artes. El cine, de hecho, no es más que la conjunción de una infinidad de éstas. Se parece en gran medida al teatro, al que solo deberíamos suprimirle los espectadores para poner en su lugar una cámara que servirá para trasladar más tarde, a esos espectadores ahora ausentes, los resultados de nuestra realización.

Zorba el griego dirigida por Michael Cacoyannis en 1964


Como ocurre con cualquier otra actividad artística todo comienza por la imaginación y la necesidad de comunicar y realizar una idea. Tras la idea viene el diseño, el boceto, el storyboard, el guión. Y como este arte es casi infinito, a la cámara que puede grabar imagen y sonido le podemos suministrar infinidad de cosas. Música, texto, imagen, interpretación. El autor intelectual de este arte suele convenirse que es el guionista, el artístico el director, el material el productor, y luego están todos los demás colaboradores que trabajarán áreas más pequeñas: los actores, los músicos, los fotógrafos, los encargados del atrezzo, los montadores, los técnicos. Hay tareas característicamente cinematográficas como las del script, que consisten en llevar un registro de cómo quedó una toma para que con la toma siguiente no ocurra un salto narrativo indeseable, por ejemplo: que el pelo del actor esté en el mismo sitio y con la misma forma, que el cigarrillo siga consumiéndose gradualmente por donde lo había dejado, que no haya un salto de eje (en la dirección de la mirada o el andar) etc.

La dificultad estriba en que hay que trabajar con tan gran cantidad de componentes que solo los grandes directores son capaces de imprimir la energía y sabiduría suficientes para conseguir que éstos arrojen el resultado deseado. Cuando por fin se consigue que toda esa conjunción de materiales suenen armónicamente y en la dirección buscada, decimos que estamos ante una obra maestra.

Por último, una curiosidad que le oí decir a un director de cine, que él siempre tenía en consideración y que quizás os pueda servir en vuestras actividades cinéfilas. Según él, dependiendo de cual sea la película que vayamos a ver, deberíamos situarnos más adelante (primeras filas) cuando se trate de una película intimista, o más atrás (últimas filas) cuando se trate de películas con grandes decorados, y siempre del lado derecho, pues la acción, al igual que ocurre con la escritura, transcurre de izquierda a derecha, de tal forma que así conseguimos que ésta venga a nosotros y no, que se aleje de nosotros.

El tercer hombre, dirigida por Carol Reed en 1949

6 comentarios:

C.C. dijo...

Hola, Atman. Interesante esta lista tuya de los 7 artes a la que das una clasificación cronológica dónde incluyes el teatro pero dejas de lado la danza, o mejor dicho, la nombras en última posición de una lista ampliada.

Si no me equivoco, se reconocen universalmente así y por este orden : pintura, escultura, arquitectura, danza, música, literatura, cine. Aunque yo tampoco esté muy segura.

Un abrazo.

Ātman dijo...

Hola, CC. Si miramos a nuestros hermanos los animales, la danza, el canto y la música debieron ser las primeras artes, relacionadas con el apareamiento y como lenguajes para comunicar un sinfín de señales amistosas o agresivas. Estuve buscando en la red cuales son las seis artes que precedieron al cine y no pude encontrar ninguna página que me pareciera fiable. Tu lista parece mejor que la mía, danza antes que teatro. Es posible que cine y teatro fueran tan solo ¿derivaciones de la danza? Y si fuera así, lo lógico sería que fuera el teatro el séptimo arte… así que a partir de ahora al cine le llamaremos el arte octavo ¿tú crees que tendremos éxito?

Otro abrazo para ti.

Dante Bertini dijo...

coincido con dudas, aunque no se si es necesaria una catalogación tan obsesiva...tendería a pensar que el gesto es anterior a la palabra, pero el gesto danzado aparece como una sofisticación más elaborada, sin embargo hay quienes sabiendo moverse se les hace imposible articular palabras en forma de mensaje...
un saludo con pirueta

Ātman dijo...

Hola, Dante. Se me ocurre que también podríamos fijarnos en la evolución de los niños cuya primera comunicación con el mundo es un sonoro y angustioso llanto, un poco más tarde aprenderá a chantajearnos y hacer teatro con esa habilidad, pero para aprender a pintar, modelar, construir, hablar, tendrá que esperar aún bastante más, y mucho más aún le costará adquirir la técnica de la escritura… si es que alguna vez la adquiere.
Te saludo a mi vez con una cabriola virtual.

Anónimo dijo...

Sí, hombre, segurísimo ; un éxito tal, que la llamarán "la lista de El Atman y C.C.".

Yo diría que teatro y cine son interpretaciones de literatura.

Si te entiendo bien, en las películas la acción transcurre de izquierda a derecha. Tendré que fijarme en este detalle en el futuro.
C.C.

Ātman dijo...

Y no solo el cine, CC. Cualquier imagen se lee de izquierda a derecha y de arriba a abajo. Al menos en el mundo occidental. No sé si para los árabes que escriben al revés esa percepción también queda invertida. En cuanto a lo otro, no puede ser, la prueba es que hasta un niño es capaz de hacer cine o teatro (aún sin saber leer).