Los del movimiento 15-M están indignados y ahora además han roto su promesa de la no violencia. El excelentísimo alcalde de Madrid, Don Alberto Ruiz-Gallardón, fue brutalmente agredido mientras sacaba a su perro por la noche. Pensaréis: estará ingresado de gravedad en algún hospital. Pues no, no se trata de lesiones físicas sino psicológicas, igual que aquellas que recibieron los parlamentarios catalanes impedidos de poder llegar a su trabajo apaciblemente como se merecen tan respetables representantes populares.
"El president" ha advertido que se hará uso de la fuerza para contraatacar tamañas agresiones, y puesto que recientemente ha habido intervenciones suficientemente fuertes por parte de los mossos d'esquadra, esas palabras podría suponer una escalada en la voluntad de reprimir a los violentos. ¿Sacar el ejército a las calles, quizás? Es lo que se merecerían esta pandilla de pulgosos, extremistas, y peligrosamente próximos a la kale borroka y la lucha armada. Para que luego se diga que los políticos ganan mucho o que disfrutan de excesivos privilegios a la hora de su retiro o condiciones de trabajo. Como auténticos “James Bonds” estos sacrificados mártires de la democracia han debido entrar "al parlament" algunos en helicóptero otros escoltados, y las agresiones físicas y verbales les dejarán no pocas secuelas traumáticas… deberían aumentarse el sueldo y rebajarse las horas de esta actividad convertida hoy en algo tan peligroso.
Y ahora para rebajar la tensión de estos momentos tan álgidos de la política española, un documento estremecedor proveniente del lejano oriente
Japan sea monster
11 comentarios:
Hola, Atman. Acabo de leer tus tres últimos posts de un golpe.
Bonita historia de amor. Quisiste repetirla y ahí la estropeaste.
En cuanto al Oceanografic, tú y yo somos hermanos en el alma. Yo lo visite el primer año de su apertura, creo que fue en el 2003. Y sentí la misma tristeza que tan bien evocas. Lo peor para mi, fueron los delfines haciendo el payaso, y una beluga blanca en aguas turbias, sola ella, inmóvil, y aunque digan que los cetáceos no tienen expresión facial, yo juraría que tenía una mirada llena de tristeza pidiéndome que la sacara de ahí.
Sí, una verdadera pena el comportamiento ( estoy hablando de los violentos ) de ciertos indignados indignantes. Están estropeando la simpatía y el apoyo de muchos.En Valencia ( no sé si lo habrás leído) han agredido a un diputado ciego corporal y verbalmente, y hasta intentaron quitarle el perro adiestrado para guiarlo.¡ Lamentable ! Sí, pero pedir que se suban el sueldo los póliticos, no gracias.
me he reído bastante, aunque amargamente...
los idiotas de siempre -tal vez habría que llamarlos ingenuos, pero ya está bien de metáforas- se dejarán convencer de la violencia de los no violentos y apañarán, con su silencio o con sus semi-convencidos, prestados argumentos, las represiones y recortes que nos esperan...
como parte integrante de esta especie tan especial, tendremos que jodernos...
Tendre que interiorizarme un poco mas sobre esta indignacion tan generalizada. Ire a ver el noticiero.
Coincido con C.C, el cetaceo parecia triste.....
Yo estoy encantado de que por fin esta gentuza peligrosa haya mostrado su verdadero rostro, para que ni los más inconscientes de los irresponsables que hasta ahora les miraban con simpatía tengan ya pretexto alguno en que seguir escudando su indignante complicidad, y para que de ese modo brille más aún, por contraste, la admirable abnegación de nuestra irreprochable clase dirigente, a quien ni esta última obscena demostración de barbarie ha impedido continuar, impávida, cumpliendo con su deber de hacer lo que les sale de los huevos.
(No hay manera, por más que intente controlar la frase acaba siempre descarrilando en algún momento. Están en todas partes...)
Hola, CC:
Ibas muy bien, pero esa negativa tuya a que los parlamentarios se suban los sueldos me suena a radical de izquierdas y muy antidemocrático… Ante todo hay que respetar la ley ¿y quién hace la ley?... ¿Me vas siguiendo?
Lo que dices del Oceanográfic me lo imaginaba, y es que contigo ya sé que puedo contar con una aliada incondicional para todo lo que tenga que ver con el respeto al medio ambiente. Y me felicito por ello.
Ay, cuánto me hizo sufrir aquella historia que hoy puedo mirar con la serenidad que no tuve entonces, aunque no creas, que todavía duele, como esas cicatrices de operaciones antiguas.
Hola, Dante:
Creo que así es, que los políticos aún no se han atrevido a reprimirlos directamente y que sus voceros se dedican a calumniarlos descaradamente. ¿Si no, cómo contener tanta indignación? He visto mucha más violencia en algunos partidos de fútbol y a ningún jugador llegando en helicóptero, y también mucha más violencia en cualquiera de esos desahucios de inocentes ciudadanos que creyeron que los ideales recogidos en nuestra constitución y un partido socialista en el poder tendrían más peso que las despiadadas leyes del mercado. Ver para creer…
Vanina:
Me alegro de tu regreso.
Vanbrugh:
Aunque pretendamos obrar correctamente el demonio siempre consigue su propósito de confundirnos y decir lo que no queríamos. Recemos para que vuelvan la cordura y recapaciten los indignados.
Un saludo cómplice.
Pues no, Atman. No soy ni de izquierdas ni de derechas. Soy del "sentido común". En pleno programa europeo de austeridad para el pueblo, no entiendo cómo puedes reivindicar más sueldo para los políticos.
Jaaaa, sí que te sigo.
Tienes razón CC, ser de izquierdas o de derechas ya no se lleva, "lo último" es ser de los de arriba o de los de abajo, de los que tienen casa y trabajo o de los que dependen de la ayuda familiar o la beneficencia. Quizás deberíamos adquirir el invento hindú de las castas, pero por si acaso no pienso comentárselo a los indignados, que están muy violentos.
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